LaSalud.mx.– La artritis reumatoide (o reumatoidea) es una enfermedad por lo regular crónica, es inflamatoria y de origen autoinmune. Esta se manifiesta normalmente en las articulaciones ocasionando dolor, rigidez y tumefacción.
Como todas las enfermedades autoinmunes su causa es desconocida hasta el momento, aunque se teoriza que tiene diferentes factores entre ellos el factor genético, por lo que pasaría a ser una enfermedad poligénica en los cuales habría algunos genes implicados. También factores como infecciones, el medio ambiente, estrés y el tabaquismo.
Regularmente es una enfermedad más común en mujeres que en hombres, esto quizás sea debs a los estrógenos, y a su aparición rondaría entre los 35 a 50 años de edad, aunque puede aparecer antes.
Síntomas de la artritis reumatoide?
Se produce una inflamación en las articulaciones en la membrana sinovial y las zonas adyacentes, en su comienzo suelen afectar las articulaciones más pequeñas de las extremidades como las muñecas, dedos etc. Provoca hinchazón en las articulaciones afectadas, entumecimiento, dolor y sensaciones de calor.
Normalmente, la sintomatología y la evolución de esta enfermedad son muy variables, por lo que suele quedar en muchos casos como síntomas articulares, si la enfermedad avanza, puede afectar ligamentos y tendones adyacentes, lo que provoca deformidades y puede limitar algunas actividades diarias.
En ciertos casos suelen presentarse algunos síntomas como fiebre, malestar general, nódulos reumatoides y cansancio, los cuales son abultamientos no dolorosos que regularmente aparecen en las zonas de presión sobre los tendones.
Tratamientos para la artritis reumatoide
Lo primero es hacer un diagnóstico de la enfermedad y llevar un tratamiento el cual ayudará para su control, de este modo se minimizarán los síntomas y su progreso.
El tratamiento farmacológico depende de lo que indique su médico. No tome cualquier medicamento sino sabe cuál es el indicado para usted, pues podría empeorar la enfermedad. Solo use el que le recete su médico.
Ningún fármaco cura la enfermedad, todos están dirigidos a tratar los síntomas y evitar el avance de la misma. Es importante complementar el tratamiento médico con otras acciones que ayudarán a mejorar su calidad de vida como:
Dormir entre 8 y 10 horas diarias, esto se debe hacer a manera que no comprometa ninguna articulación.
Llevar una alimentación y hábitos de vida saludables
En períodos donde haya más dolor se deben evitar realizar esfuerzos, sobre todo con las manos, no estar mucho tiempo de pie y no hacer ejercicios repetitivos con las articulaciones.
Practicar ejercicio de forma habitual, esto para ayudar a fortalecer los músculos que rodean a las articulaciones afectadas.
Buscar asesoría de un fisioterapeuta