Hipertensión Arterial Pulmonar, enfermedad “no común”

 

La Hipertensión Arterial Pulmonar (HAP) afecta “más o menos a 15 personas por cada millón de habitantes”, mientras que a la vez, daña a “menos de uno por ciento de las personas con VIH/sida, aseveraron expertos en conferencia de prensa.
 
La HAP es una enfermedad donde los vasos sanguíneos de los pulmones se endurecen y estrechan, motivo por el cual el corazón hace un “mayor” esfuerzo para bombear sangre. Pero con el tiempo, esto provoca que el lado derecho del corazón se vuelva más grande y no haya suficiente flujo de sangre a los pulmones para recoger oxígeno. Hasta el momento no existe cura para esta enfermedad pero el tratamiento ayuda a controlar los síntomas y prevenir mayor daño pulmonar.
 
Los síntomas de la HAP son la fatiga, dificultad para respirar –sobre todo cuando se hace algún esfuerzo físico–, desmayo, dolor de pecho, tos y color azulado de labios y piel. Algunas de estas molestias pueden presentar en otros padecimientos, por lo cual médicos pueden confundirse y diagnosticar asma, ansiedad, angina de pecho o trastornos del ritmo cardiaco.
 
“Esto es lo que retrasa el diagnóstico y no se puede dar un tratamiento oportuno. Sería importante que esta enfermedad la pudieran tener presente los médicos generales, los pediatras, los internistas para que lo pudieran diagnosticar en los centros de primer y segundo nivel, centros de salud y centros de especialidades y hospitales de área, respectivamente,”, señaló Roberto Aron, médico psiquiatra.
 
Las pruebas para diagnosticar la HAP son los rayos X de tórax, electrocardiogramas, estudios de laboratorio, ecocardiogramas y cateterismo cardiaco derecho. Los tratamientos son los inhibidores de endotelina –sustancia que cierra las arterias pulmonares–, sildenafil y tadalafil, –medicamentos también usados para la disfunción eréctil. Algunas causas son los padecimientos pulmonares, cardiacos, reumatológicos, sistemáticos y la cirrosis hepática.
 
Los hospitales donde pueden detectar un diagnóstico de HAP son en los de tercer y cuarto nivel –nosocomios especializados en algún tipo de patología– como el Centro Médico La Raza, el Centro Médico Nacional 20 de Noviembre, el Centro Médico Occidente de Guadalajara, y el Instituto de Cardiología de México, entre otros.
 
“La HAP afecta más o menos a quince personas por cada millón de habitantes. Es una enfermedad no común” aseguró Roberto Arón.
 
HAP en los pacientes con VIH
 
“Afortunadamente el número de casos de hipertensión arterial pulmonar asociados al VIH es menos de uno por ciento de todos los casos de los pacientes con VIH. Es una complicación rara”, señaló por su parte Guadalupe Espitia, médica neuróloga del Hospital 1 de Octubre.
 
Señaló que para que se presente este tipo de hipertensión en los pacientes con VIH “por lo menos deben tener 20 o 25 años de la enfermedad (VIH)”; asimismo, aseguró que hay fármacos para la HAP que se contraponen a los retrovirales “pero esto depende de la vía metabólica que esté utilizando los antirretrovirales y de la vía metabólica de los medicamentos para HAP”.
 
Explicó que los tratamientos para este tipo de pacientes son personalizados y específicos, pues dependerá de las necesidades de cada uno, de sus antecedentes, de las combinaciones farmacológicas. Pues la intención es “brindar alternativas”.
 
Las actividades que pueden realizar dependen del estadio en el que se encuentren, ya que si están en una clase A de VIH –donde su capacidad orgánica está intacta– y una clase funcional 1 o 2 de HAP, “pueden ser un paciente completamente normal”, lo que quiere decir que pueden realizar cualquier actividad con “las limitaciones que cada enfermedad le proporcione”. Pero si se encuentran en un estadio C de VIH –carga viral muy elevada– y HAP con insuficiencia cardiaca, “estos pueden requerir hospitalización”.
 

 

Acerca Redacción

Equipo de redacción de la red de Mundodehoy.com, LaSalud.mx y Oncologia.mx

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