A pesar de que muchos consideran a la tuberculosis (TB) como una enfermedad del pasado, actualmente continúa representando uno de los principales problemas para la salud pública en el mundo.
En 1993, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró a la tuberculosis como enfermedad re-emergente, debido a una serie de factores que inciden directamente, como enfermedades inmunodepresoras (VIH/ SIDA), diabetes, adicciones (alcoholismo,tabaquismo y drogas ilegales), explosión demográfica, pobreza, desnutrición y movimientos migratorios.
El Dr. Jesús Felipe González, Secretario General para América Latina de la Unión Internacional de Lucha contra la Tuberculosis y Enfermedades Pulmonares, señaló que las adicciones son un factor de mayor riesgo para contraer esta infección. Por ejemplo, en el caso del tabaquismo, se podría evitar hasta una de cada cinco muertes por tuberculosis si los pacientes no fueran fumadores. %u201CMás del 20% de la incidencia mundial de la tuberculosis puede atribuirse al tabaco, que multiplica por más de 2.5 el riesgo de la infección.%u201D
Estudios recientes han encontrado que fumar o exponerse al humo de tabaco ajeno están significativamente asociados con la enfermedad de la tuberculosis, incluyendo a niños y jóvenes. El número de cigarrillos fumados y la duración del tabaquismo también pueden influir en el riesgo de infección, la recurrencia de ésta y la mortalidad por tuberculosis.
%u201CLos profesionales deben aconsejar a los pacientes que dejar de fumar y evitar la exposición al humo de tabaco son importantes para controlar la tuberculosis y proporcionarles información sobre asistencia médica en clínicas para dejar de fumar%u201D, indicó el funcionario de La Unión.
De acuerdo con la OMS, la tuberculosis (TB) es una de las enfermedades más devastadoras de la historia. A nivel mundial, tres de cada diez personas están infectadas y entre el 5% al 10% de ellas desarrollarán la enfermedad en algún momento de sus vidas. Un enfermo sin tratamiento infecta de 10 a 15 personas en un solo año y puede morir en 5 años. Entre 1990 y 2007 se notificaron más de 28.7 millones de casos y 1.77 millones de defunciones. Las personas con VIH tienen el 50% de probabilidad de infectarse.
En México, en 2010 se reportaron 18,848 casos nuevos de TB, de los cuales el 81.6% correspondió a TB pulmonar. El 20% de los casos nuevos estuvo asociado con la diabetes y el 5.8% con VIH/SIDA. En 2009 se registraron 2,222 defunciones debido a TB, de las cuales el 84% se debieron a TB pulmonar.
A fines de enero de 2011 el Sistema de Salud Pública mexicano decretó una alerta sanitaria en todo el país ante la existencia de un tipo de tuberculosis fármaco-resistente y por tanto, más letal, aunque consideran que la enfermedad está bajo control.
El Dr. González Roldán explicó que %u201Cla tuberculosis es una enfermedad infecciosa crónica causada por el bacilo tuberculoso. Es un padecimiento transmisible que puede contraerse al inhalar el bacilo en microgotas expedidas cuando un enfermo habla, canta, ríe, estornuda, pero principalmente cuando tose; todos los que están a su alrededor respirando se encuentran en riesgo.
%u201CLa forma de tuberculosis más común es la pulmonar. Sus síntomas son: tos persistente con expectoración por 15 o más días, debilidad, pérdida de peso, fiebre, sudoración nocturna, anorexia, cansancio, decaimiento, diarrea, desnutrición extrema y flema con sangre. El diagnóstico se establece a través de baciloscopia, generalmente. De no atenderse con oportunidad, deja secuelaseconómicas, emocionales y familiares difíciles de superar%u201D, advirtió el Dr. González Roldán.
Como país en transición, con intensos cambios demográficos y socioeconómicos, México ha asumido una serie de compromisos en salud, compatibles con nuestra realidad y en concordancia con organismos internacionales, encaminados a abatir enfermedades que aún siguen considerándose flagelos de la modernidad, como la tuberculosis. El enfermo de TB requiere de atención multidisciplinaria, así como apoyo familiar y comunitario.
Una de las metas en la lucha contra la tuberculosis es apoyar la expansión de la estrategia TAES (Tratamiento Acortado Estrictamente Supervisado), de la OMS, que consiste, entre otros elementos, en acceso a servicios de laboratorio de calidad (baciloscopias), suministro interrumpido de medicamento, sistema de documentación y reporte que permita evaluar resultados.
%u201CTambién es necesario enfocarnos en la prevención%u201D, señaló el Dr. González Roldán. %u201CHay factores de riesgo que pueden evitarse como el alcoholismo, el tabaquismo y el consumo de drogas ilegales.%u201D El tabaco es la segunda mayor causa de muerte en todo el mundo y produce el fallecimiento de uno de cada 10 adultos. Se espera que el número de muertes anuales aumente hasta 8 millones en 2030.
Para concluir, el especialista enfatizó en que %u201Ces importante continuar apoyando las políticas para el control del tabaco, a fin de asegurar espacios 100% libres de humo de tabaco en todo el país, y así evitar las consecuencias de fumar e inhalar el humo de segunda mano, que de acuerdo a un estudio publicado en la revista The Lancet en el 2010, causa la muerte de 600,000 personas en el mundo. Controlar la epidemia del tabaco ayudará a controlar la epidemia de la tuberculosis.%u201D
El Día Mundial de la Tuberculosis se conmemora cada año el 24 de marzo, día en que el Dr. Robert Koch detectó en 1882 la causa de la tuberculosis, a saber, el bacilo tuberculoso, lo que representó un paso decisivo hacia el diagnóstico y la cura de la enfermedad. La Organización Mundial de la Salud (OMS), la Alianza Mundial Alto a la Tuberculosis, redes de organizaciones y países que luchan contra la enfermedad, organizan el Día Mundial para dar a conocer el alcance de la enfermedad y las formas de prevenirla y curarla. La OMS trabaja para reducir, de aquí al 2015, las tasa de prevalencia y muertes por la mitad.