%u2022 La farmacéutica tiene en desarrollo una cifra histórica de moléculas oncológicas con posibilidad de llegar al mercado.
México, D.F. La compañía farmacéutica Eli Lilly estableció en el presente año dos marcas históricas como parte de la lucha que mantiene contra el cáncer, enfermedad que se ha convertido en la tercera causa de muerte en el país, con más de 60 mil decesos provocados al año.
La primera de estas marcas se refiere a la participación de este laboratorio, el pasado 4 de febrero, en la convocatoria y organización del evento que permitió formar, en el zócalo capitalino, la pulsera humana más grande del mundo, para inscribirla como uno de los récords del prestigiado libro Guinness.
En este caso, Eli Lilly México se sumó a los esfuerzos de la Fundación Livestrong, que fundara el siete veces campeón de la Tour de Francia, Lance Armstrong, para congregar a casi 5 mil personas, quienes formaron un gran círculo amarillo que representa el esfuerzo de los mexicanos por combatir esta enfermedad.
La mencionada pulsera humana fue una recreación a gran escala de las pulseras Livestrong, las cuales, a partir de 2004, circularon por todo el mundo como parte de una estrategia para recolectar fondos destinados a la prevención, tratamiento y control del cáncer.
El segundo récord que Eli Lilly rompe en el 2012 consiste en mantener en desarrollo la mayor cantidad de moléculas farmacéuticas de su historia, las cuales en el futuro ofrecerán nuevas y más eficaces alternativas de tratamiento para los padecimientos oncológicos.
En la actualidad, la compañía tiene más de 70 nuevas moléculas con potencial de llegar al mercado, para las cuales ha destinado una inversión de alrededor de 5 mil millones de dólares anuales.
El cáncer es una de las principales causas de mortalidad en todo el mundo, pues la Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que 7.6 millones de personas mueren anualmente por este motivo y que 84 millones fallecerán en los próximos 10 años si no se toman las medidas necesarias.
Más del 70 por ciento de las defunciones se producen en países con ingresos bajos y medianos, donde los recursos disponibles para la prevención, diagnóstico y tratamiento de esta enfermedad son limitados.
Dentro de los diversos tipos de cánceres que se tienen detectados, el pulmonar se ha colocado como el de mayor mortalidad entre la población general, debido a crecientes factores de riesgo como el tabaquismo.