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A pesar de que desde 2004 el gobierno de México firmó y ratificó el Convenio Marco para el Control del Tabaco (CMCT) de la Organización Mundial de la Salud (OMS), de acuerdo con el VI Reporte de la Sociedad Civil sobre el cumplimiento de todas las recomendaciones de este instrumento internacional, el avance es lento y requiere mayor compromiso por parte de las autoridades federal, de los estados y los municipios.
La implementación del CMCT se ha incumplido sobre todo en las siguientes áreas estratégicas: espacios 100% libres de humo de tabaco, como lo solicita la Ley General para el Control del Tabaco (LGCT); publicidad y patrocinio; venta de tabaco a menores de edad; venta de %u201Ccigarros sueltos%u201D; pictogramas de advertencia sanitaria; y campañas eficaces para la prevención y acceso al tratamiento de esta adicción, que cada año cobra más de 60 mil vidas en nuestro país.
De lo que se ha hecho bien en materia de Control de Tabaco en México, el maestro Erick Antonio Ochoa, Coordinador de Iniciativas para el Control del Tabaco de la Fundación InterAmericana del Corazón (FIC – México) manifestó que %u201Cen materia fiscal los avances fueron importantes en 2010, me refiero a la aprobación, por parte del Congreso de la Unión, de aplicar a través del Impuesto Especial sobre Productos y Servicios (IEPS) $0.35 centavos por cigarro, que representa $7 pesos por cajetilla de 20 unidades, lo cual significa un aumento en 25% de precio al público de las marcas más vendidas%u201D.
Destacó que %u201Ccon acciones como esta es como se ha logrado, por ejemplo, que entre 2002 y 2008 se haya incrementado en 19.6% las personas que nunca han consumido tabaco y se ha disminuido en 24.8% el número de individuos que fuman diariamente[i][i], esto con un ritmo más acelerado a partir de 2005, lo que coincide con el inicio de la instrumentación de acciones coordinadas, recomendadas por la OMS a través del CMCT%u201D.
Respecto a los importantes avances en política fiscal sobre productos de tabaco, el Dr. Jesús Felipe González Roldán, vicepresidente y fundador de la Red México Sin Tabaco, denunció diversos esfuerzos de la industria tabacalera para echar atrás el incremento en el impuesto al tabaco.
%u201CEn una posición técnicamente indefendible e incontrovertiblemente falsa, la compañía British American Tobacco (BAT) acusa con arrogancia al Congreso de México al decir, con mentira, que debido al aumento de impuestos que aprobaron en 2010 habrá una pérdida de recaudación. La realidad es que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) informó que entre enero y marzo de este año no se cayó la recaudación, sino que por el contrario en este periodo se recaudaron más de 1,600 millones de pesos adicionales, 17.5% más que el año pasado%u201C, destacó el Dr. González Roldán.
Desde el pasado 12 de abril de 2011, BAT hizo pública una campaña (con desplegados en periódicos y anuncios espectaculares) cuya intención es presionar a autoridades y legisladores, así como desinformar a la sociedad, sobre un supuesto incremento de contrabando debido al aumento en el impuesto al tabaco.
%u201CEntre sus osadas aseveraciones señalan la comercialización en México de 100 marcas piratas, lo cual es altamente cuestionable, en virtud de que tan sólo el mercado en México tiene alrededor de 60 marcas cuya propiedad es de las dos principales compañías tabacaleras: BAT y Philip Morris (PM). A la fecha no han sido capaces de presentar la lista de dichas marcas ni difunden los estudios en que supuestamente se respaldan. Esto es una muestra del desdén de la IT hacia la salud de los mexicanos%u201D, enfatizó el especialista de la Red México Sin Tabaco.
El Dr. Rafael Camacho Solís, fundador de la Alianza Contra el Tabaco (ACTA), denunció que %u201Cen México no ha habido ningún avance en relación con el cumplimiento del Artículo 16 del CMCT ni en el caso de Artículos 15 y 16 de la LGCT. Ocho de cada diez tiendas venden cigarros a menores de edad y en tiendas, puestos de revistas y cruces de esquina se venden cigarrillos en forma individual, a pesar de que se sabe que el tabaco es frecuentemente la droga de inicio en el consumo del alcohol y en el uso de drogas ilegales.%u201D
El especialista enfatizó que la sociedad civil propone que se haga una reforma legal a la LGCT en la que la venta de tabaco a menores de edad sea equiparable con el delito de corrupción de menores y que a los establecimientos que violen la ley se les sancione con pérdida de dominio en la propiedad del local.
En su exposición, la Dra. Sonia Meza, presidenta de la Red México Sin Tabaco, recordó las más recientes resoluciones de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) a favor de la salud de los mexicanos, al negar amparos a empresas restauranteras y hoteleras contra los espacios 100% libres de humo de tabaco establecidos en la Ley de Protección a la Salud de los No Fumadores del Distrito Federal (LPSNF DF), así como a grandes establecimientos de autoservicio contra la LGCT, en materia de exhibición de cigarrillos donde el consumidor pueda tomarlos libremente.
Indicó que, %u201Ctomando como ejemplo que los magistrados de la Suprema Corte antepusieron el derecho constitucional a la salud a los intereses comerciales de las empresas, la LGCT aún requiere modificaciones, ya que es incoherente y fraudulenta, porque si bien fomenta el desarrollo de espacios libres de humo, permite fumar en áreas cerradas, lo cual viola al Artículo 8 del CMCT. Nos llama la atención que en 2011 las únicas leyes que establecen espacios públicos 100% libres de humo de tabaco son las del Distrito Federal, el estado de Tabasco y el municipio de Tecate, en Baja California.%u201D
El Dr. Francisco López Antuñano, Presidente de la Alianza Contra el Tabaco (ACTA) mencionó en su intervención que %u201Cen el Distrito Federal, la LPSNF sigue siendo violada en numerosos antros o clubes nocturnos, debido a la inexistencia de sanciones. A pesar de que la Secretaría de Salud y el Instituto de Verificación Administrativa iniciaron desde mediados de 2010 operativos semanales de verificación, la facultad de imponer sanciones corresponde indebidamente a las delegaciones, que poco ejercen su acción de gobierno, con excepción de Álvaro Obregón que opera el programa Cero Humo de Tabaco. La propuesta aquí es que el Instituto de Verificación Administrativa cuente con facultades de vigilancia y sanción%u201D, manifestó López Antuñano.
En cuanto los pictogramas de advertencia sanitaria, el Dr. Rafael Camacho Solís, fundador de la Alianza Contra el Tabaco (ACTA), indicó que %u201CMéxico violó al Artículo 11 del CMCT, debido a que éstos fueron implementados tardíamente en diciembre de 2010, cuando debieron haber aparecido a mediados de 2009. Inclusive existen marcas como Séneca, DUO de PM que a la fecha no cumplen con la Ley%u201D. Añadió que %u201Cestá pendiente la modificación de la LGCT para que la imagen ocupe un mayor porcentaje de la cara anterior y, de ser posible, que también ocupe la cara posterior.%u201D
El VI Reporte de la Sociedad Civil sobre la Implementación del CMCT subraya la notoria ausencia de campañas gubernamentales de promoción y prevención de la salud que adviertan, desde el Ejecutivo hasta los gobiernos locales, los riesgos que conllevan el consumo de tabaco, primordialmente entre niños, adolescentes y mujeres.
Otro tema pendiente es la prohibición completa de la publicidad, promoción y patrocinio de los productos de tabaco. Nuestra actual legislación permite la publicidad en revistas dirigidas a población adulta, que caen en manos de menores, así como la dirigida a domicilio. Además, se ha incrementado la publicidad de tabaco en antros y lugares de reunión en todo el país. De ahí la importancia de reformar la LGCT para prohibir totalmente la publicidad de productos de tabaco.
El tema relacionado con brindar acceso a tratamiento a las personas que fuman sigue siendo una asignatura pendiente. Ni el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ni el Seguro Popular brindan tratamiento para tabaquismo, a pesar de que es factor de riesgo importante para enfermedad y muerte en México y que nos cuesta como sociedad más de $45 mil millones de pesos anuales.
Los representantes de la sociedad civil destacaron especialmente el hecho de que el recientemente creado Comisionado Nacional contra las Adicciones, tiene entre sus funciones la prevención y tratamiento de adicciones al alcohol y las drogas ilícitas, pero deja fuera de su ámbito de acción la prevención y control del tabaquismo, lo cual es reflejo de los intereses y cotos de poder detrás de tan importante determinación.
Como conclusión, el Dr. Rafael Camacho Solís expuso que %u201Cen México la mortalidad y morbilidad atribuibles al tabaco para la población varía ampliamente, en función de la efectividad de los programas locales incipientes de prevención y control, aún en vías de desarrollo. No obstante de la ratificación del CMCT por el gobierno de México en 2004, continúa ausente la decisión política de los poderes ejecutivo, legislativo y judicial al más alto nivel para organizar e instrumentar un programa nacional que incorpore la respuesta organizada de la sociedad civil, en alianza con las instituciones del Estado Mexicano, para la prevención, control y vigilancia del tabaquismo como problema de salud pública%u201D.
El fundador de la Alianza contra el Tabaco emitió las siguientes recomendaciones finales: a) insistir en las Cámaras de Diputados y Senadores sobre la necesidad de promulgar bases jurídicas que permitan organizar, estructurar y financiar el Programa Nacional para la Prevención, Control y Vigilancia del Tabaquismo en México; b) trabajar con las legislaturas y secretarías de salud estatales para que, aprovechando la concurrencia en la protección del derecho a la salud, avalada por la SCJN, promulguen leyes y reglamentos que aseguren espacios 100% libres de humo de tabaco; c) buscar el incremento en impuestos a los productos de tabaco que queda pendiente para el periodo 2011- 2012, idealmente diez pesos más; d) realizar esfuerzos de comunicación más contundentes para fortalecer la conciencia pública contra la oferta, demanda y consumo de productos de tabaco; y finalmente e) fortalecer a la Comisión Nacional contra las Adicciones (CONADIC) y replantear el Reglamento Interior de la Secretaría de Salud para que integre la prevención y el control de tabaquismo entre sus responsabilidades y funciones.
