¿Sabías que?
La influenza estacional es una infección viral aguda que afecta al sistema respiratorio y que se trasmite con facilidad de persona a persona y que muchas veces se puede confundir con un resfriado común por falta de información. Esta falta de comunicación genera resultados alarmantes.
Estudios recientes efectuados por
La población vulnerable a tal afección son niños menores de dos años, adultos mayores de 65 años e individuos con ciertas condiciones médicas, como enfermedades crónicas, cardiacas, pulmonares, renales, hepáticas, diabetes o con un sistema inmunológico débil.
Según OMS, la mayoría de las muertes asociadas a influenza en los países industrializados ocurre en personas mayores de 65 años de edad.
Síntomas de la influenza
Presencia de fiebres altas, dolores musculares, de cabeza y/o de garganta, falta de apetito, tos seca, escurrimiento nasal, cansancio y malestar en general importante.
La falta de atención a estos síntomas pueden decaer a una complicación como neumonía bacteriana secundaria o viral y hasta el agravamiento de enfermedades crónicas (incluyendo la insuficiencia cardiaca congestiva y diabetes)
La mejor forma de prevenir esta enfermedad es:
· Cubrirse la boca y nariz con un pañuelo al toser o estornudar (debido a que le virus se transmite a través de pequeñas gotitas de saliva expulsadas; o al estrechar la mano y/o tocar superficies contaminadas con el virus).
· Vacunarse.
Cada cuando me vacuno
La OMS recomienda que se vacune dos veces por año ya que el virus muta y las vacunas deben también actualizarse para hacerles frente.
Quiénes debemos vacunarnos