El Hospital General de México (HGM) de la Secretaría de Salud cuenta con un Departamento de Atención Integral del Adulto Mayor, en el que la persona recibe una evaluación integral para identificar y atender las enfermedades que padezca, como diabetes osteoartrosis, hipotiroidismo y otras, además de rehabilitación y atención psicológica en caso de que lo requiera.
Señaló lo anterior el subdirector médico del HGM, Lorenzo García, quien añadió que como parte del servicio, se cuenta con una sala de día, para completar la recuperación del paciente con terapia ocupacional y recreativa, además de la convivencia con otras personas de igual edad.
En el Departamento no sólo se atiende al paciente, sino se vigila si se toma los medicamentos y de qué forma, quién se los proporciona, su situación económica para ajustar el tratamiento de acuerdo a ello y con quién vive y cómo, a fin de dar atención individualizada.
El especialista en geriatría mencionó que las enfermedades más frecuentes en esta etapa de la vida son los síndromes de caídas, de inmovilidad, úlceras por presión, maltrato, trastornos del sueño, pérdida de apetito y enfermedades crónico-degenerativas.
En México 9% de la población es adulta mayor y 70% tiene algún grado de discapacidad, por lo general padecen enfermedades crónico degenerativas, viven en familias disfuncionales y tienen problemas económicos.
Subrayó que la familia debe entender el proceso de envejecimiento y el papel de un adulto mayor dentro de ese núcleo, escuchándolo y tomándolo en cuenta en las decisiones, ya que ello le ayuda a mantenerlo en armonía.
Sugirió cuidar la salud durante toda la vida, que debe acompañarse de diversión para que favorezca la tranquilidad cognitiva y afectiva, disfrutar los periodos de vacaciones, hacer lo que les gusta como leer, ir al cine o hacer deporte. De esta forma, se puede llegar a un envejecimiento adecuado.
Es decir, subrayó el especialista, la población en etapa productiva debe tener una educación para la vejez a fin de llegar a esta edad en las mejores condiciones y tratar a quienes ya están en ese periodo como se debe.
En ese sentido, propuso mantener activo al adulto mayor de acuerdo con sus condiciones cardiopulmonares para evitar la inmovilidad y hacerlo sentir útil, por ejemplo que ayude en las labores de la casa, además de mantenerlo en vigilancia médica.
También, dijo, es importante que la familia tenga conocimientos generales de tanatología, que tengan presente a la muerte como parte de la vida, para estar preparados cuando llegue el desenlace final, sobre todo si las condiciones en las que vive el adulto mayor son desfavorables.
Finalmente, comentó que la persona de la tercera edad que desee atención en el servicio de geriatría del HGM siempre debe ir acompañada de un familiar o amigo y acudir primero a consulta externa.