- El Día dedicado a las EPOC puede ser un buen motivo para dejar de fumar; decisión que requiere de fuerza de voluntad, apoyo familiar y ayuda clínica
Fumar es uno de los hábitos más nocivos para el hombre, ya que puede ocasionar problemas como el
cáncer de pulmón, bronquitis crónica, enfisema pulmonar, enfermedad pulmonar
obstructiva crónica (EPOC), aterosclerosis, infarto del miocardio, cáncer de boca,
de esófago, gastritis, úlceras sépticas, caries, dientes amarillos, mal
aliento, cáncer de vejiga, además de que en el embarazo se puede ocasionar un
parto prematuro, bebés de bajo peso y con enfermedad de la membrana hialiana,
por mencionar algunas.
Especialistas
en Neumología de Adultos adscritos a la Delegación Estado de México Poniente
del Instituto Mexicano del Seguro Social, explican que cada cigarro contiene
aproximadamente cuatro mil sustancias tóxicas que tienen contacto directo con
nuestro organismo; entre ellas se encuentran la nicotina, alquitrán, cadmio,
pireno, amoniaco, acetona, cianamida, talio, monóxido de carbono, arsénico,
entre otras.
El
decidir dejar de fumar es un gran paso en la vida del fumador, beneficia su
salud y la de quienes lo rodean, ya que estos últimos se convierten en
fumadores pasivos, pues con el simple hecho de inhalar el humo también tienen
contacto con las sustancias antes mencionadas y se ven proclives a contraer
alguna de sus enfermedades, por ello la importancia de evitar fumar en espacios
cerrados y en los que se encuentren niños y adultos mayores.
Existen
diversas formas y tratamientos para dejar de fumar que prometen cierta
eficacia, sin embargo, lo principal para llevarlo a cabo es que el fumador esté
consciente y decidido a dejar de hacerlo, además de que necesita el apoyo de la
familia y círculo de amigos, ya que cuando se encuentra en niveles avanzados,
más que una enfermedad, el tabaquismo es una adicción.
Lo
principal es deshacerse de todos los cigarros y ceniceros que se tengan en
casa, el automóvil y el lugar de trabajo, así como no permitir que otros fumen
en la casa para evitar la ansiedad. El apoyo moral de la familia y amigos
representa un gran paso, sin embargo el apoyo
médico y psicológico son decisivos para tratar la enfermedad.
Una de
las mejores terapias para dejar el hábito de fumar es mantenerse ocupado y
realizar actividades como salir a caminar, practicar deporte, platicar con personas, leer, o hacer alguna
tarea que requiera de su atención y reduzca la tensión emocional.
La fuerza
de voluntad para dejar de fumar es primordial, aunque en muchas ocasiones y más
cuando el fumador lleva varios años con la rutina no basta, por lo cual se
requiere de ayuda profesional, debemos tomar en cuenta que muchas de las
sustancias contenidas además de ser tóxicas producen dependencia.
Uno de
los factores más preocupantes en este proceso, es la llamada recaída, la cual
sucede por lo regular dentro de los primeros tres meses de abandono del tabaco,
sin embargo debemos estar conscientes del gran esfuerzo que se está haciendo
para evitarla, mencionaron los especialistas.
Estas
ocurren cuando las personas se encuentran en estados de estrés, nerviosismo,
alteración o con cualquier tipo de preocupación, es en este momento donde los
allegados a él deben intervenir, tratando a toda costa que sus estados de ánimo
cambien bruscamente.
Cabe
destacar, que quien deja de fumar debe ser monitoreado clínicamente en un lapso
aproximado de 10 años, ya que en este tiempo aún puede correr con el riesgo de
desarrollar alguno de los padecimientos antes mencionados.
La
Delegación Estado de México Poniente del Seguro Social, cuenta con el personal
capacitado para brindar el apoyo en el momento en que la persona decida dejar
de fumar, además de atención médica, cuenta con Centros de Seguridad Social y
Unidades Deportivas donde se ofrecen cursos y talleres que pueden ayudar al
fumador a enfocar su mente en otras actividades.