Durante 2006 se otorgaron 637 mil consultas por asma en el Seguro Social y en Urgencias se suscitaron 255 mil casos por crisis.
Se denomina Guía Práctica Clínica y servirá para estandarizar el tratamiento de la enfermedad en todas las unidades médicas del Instituto.
Se denomina Guía Práctica Clínica y servirá para estandarizar el tratamiento de la enfermedad en todas las unidades médicas del Instituto.
Se estima que en México existen cerca de 10 millones de personas que padecen asma, lo que la convierte en un problema de salud pública. Durante 2006 el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) invirtió más de 641 millones de pesos en la atención de esta enfermedad.
En conferencia de medios, el doctor Martín Becerril Ángeles, jefe del Departamento de Alergia e Inmunología Clínica del Hospital de Especialidades del Centro Médico Nacional La Raza, explicó que es una enfermedad broncopulmonar inflamatoria crónica, acompañada de hiperreactividad, es decir, que el paciente responde a estímulos ambientales.
Comentó que el 80 por ciento de los casos con asma se presentan antes de los 5 años de edad lo que la ubica en la enfermedad crónica más frecuente en la infancia y la principal causa de ausentismo escolar.
Es por ello que especialistas del Instituto elaboraron una Guía Práctica Clínica para la atención del paciente con asma para mejorar significativamente el control y tratamiento de este padecimiento. El documento se distribuirá en todas las unidades médicas de la Institución.
Respecto del número de consultas por esta enfermedad, dijo, que durante 2006 se presentaron 449 mil en las Unidades de Medicina Familiar y 188 mil en los centros de especialidades. En total, se brindaron 637 mil consultas por asma en el Seguro Social. En lo que se refiere a los servicios de urgencias, en el citado periodo se suscitaron 255 mil casos por crisis.
El doctor Becerril Ángeles indicó que el objetivo principal de la Guía es servir como un instrumento para mejorar la calidad de la atención institucional de niños y adultos asmáticos y se refiere específicamente al diagnóstico y tratamiento de pacientes de cualquier edad y género con asma.
Proporciona también recomendaciones acerca del manejo eficiente del asma, en el primer, segundo y tercer nivel de atención del Instituto y fue elaborada para uso de médicos alergólogos, neumólogos, pediatras y, en general, todo el personal de salud que atiende pacientes con asma.
Por su parte, el doctor José Luis López Durán, Alergólogo del Nosocomio destacó que existe una predisposición genética de esta enfermedad y el riesgo es mayor si los padres del menor fuman ya que se acelera el desencadenamiento del asma.
Por lo que se refiere a los medicamentos que proporciona el Seguro Social para el control del padecimiento, aseguró que el Seguro Social proporciona dos tipos, los de rescate que son los que se utilizan en el momento de una crisis cuando el paciente no puede respirar y los que se conocen como de control y su utilización es de largo plazo.
En general, los medicamentos son inhalados como esteroides, antiinflamatorios y broncodilatadores de larga duración que se han incorporado al cuadro básico del IMSS. De manera complementaria, los médicos del Instituto aplican inmunoterapia para los pacientes que padecen alergias por medio de vacunas cuando se detecta que la enfermedad se debe a un factor alérgico.
La señora Daría, padece asma moderada originada por una rinitis alérgica, relato que durante una crisis experimenta asfixia con tos que la debilita al grado de sentir que no puede respirar.
“Desde hace cuatro años comenzó mi tratamiento en el IMSS donde me practicaron pruebas de sangre que determinaron que el problema era originado por una alergia. Además de los medicamentos broncodilatadores, recibí dos veces por semana una vacuna de los cuales dependo para el control de mi enfermedad, hasta el momento me he sentido bien”.
Se estima que en México existen cerca de 10 millones de personas que padecen asma, lo que la convierte en un problema de salud pública. Durante 2006 el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) invirtió más de 641 millones de pesos en la atención de esta enfermedad.
En conferencia de medios, el doctor Martín Becerril Ángeles, jefe del Departamento de Alergia e Inmunología Clínica del Hospital de Especialidades del Centro Médico Nacional La Raza, explicó que es una enfermedad broncopulmonar inflamatoria crónica, acompañada de hiperreactividad, es decir, que el paciente responde a estímulos ambientales.
Comentó que el 80 por ciento de los casos con asma se presentan antes de los 5 años de edad lo que la ubica en la enfermedad crónica más frecuente en la infancia y la principal causa de ausentismo escolar.
Es por ello que especialistas del Instituto elaboraron una Guía Práctica Clínica para la atención del paciente con asma para mejorar significativamente el control y tratamiento de este padecimiento. El documento se distribuirá en todas las unidades médicas de la Institución.
Respecto del número de consultas por esta enfermedad, dijo, que durante 2006 se presentaron 449 mil en las Unidades de Medicina Familiar y 188 mil en los centros de especialidades. En total, se brindaron 637 mil consultas por asma en el Seguro Social. En lo que se refiere a los servicios de urgencias, en el citado periodo se suscitaron 255 mil casos por crisis.
El doctor Becerril Ángeles indicó que el objetivo principal de la Guía es servir como un instrumento para mejorar la calidad de la atención institucional de niños y adultos asmáticos y se refiere específicamente al diagnóstico y tratamiento de pacientes de cualquier edad y género con asma.
Proporciona también recomendaciones acerca del manejo eficiente del asma, en el primer, segundo y tercer nivel de atención del Instituto y fue elaborada para uso de médicos alergólogos, neumólogos, pediatras y, en general, todo el personal de salud que atiende pacientes con asma.
Por su parte, el doctor José Luis López Durán, Alergólogo del Nosocomio destacó que existe una predisposición genética de esta enfermedad y el riesgo es mayor si los padres del menor fuman ya que se acelera el desencadenamiento del asma.
Por lo que se refiere a los medicamentos que proporciona el Seguro Social para el control del padecimiento, aseguró que el Seguro Social proporciona dos tipos, los de rescate que son los que se utilizan en el momento de una crisis cuando el paciente no puede respirar y los que se conocen como de control y su utilización es de largo plazo.
En general, los medicamentos son inhalados como esteroides, antiinflamatorios y broncodilatadores de larga duración que se han incorporado al cuadro básico del IMSS. De manera complementaria, los médicos del Instituto aplican inmunoterapia para los pacientes que padecen alergias por medio de vacunas cuando se detecta que la enfermedad se debe a un factor alérgico.
La señora Daría, padece asma moderada originada por una rinitis alérgica, relato que durante una crisis experimenta asfixia con tos que la debilita al grado de sentir que no puede respirar.
“Desde hace cuatro años comenzó mi tratamiento en el IMSS donde me practicaron pruebas de sangre que determinaron que el problema era originado por una alergia. Además de los medicamentos broncodilatadores, recibí dos veces por semana una vacuna de los cuales dependo para el control de mi enfermedad, hasta el momento me he sentido bien”.